Para ellos el mercado no tiene responsabilidad alguna. Bajo
esta óptica, la vida humana se ha depreciado, es fácilmente sustituible. Hay
más seres humanos que petróleo, que oro, etcétera.
Por otro lado, dijo el doctor, estamos asistiendo a la
presencia de culturas delincuenciales, donde domina un erotismo de carácter
patriarcal cuyo fin último es someter. La violación y asesinato de mujeres no
es un delito sexual sino un delito de poder, dijo el doctor Manero quien ha
investigado casos de feminicidio.
En la educación de los niños priva la ausencia de elementos
éticos y una mala interpretación de los derechos humanos. Padres, maestros y la
sociedad en general ignoran la advertencia de fijarles límites o se van al
extremo del maltrato infantil, un problema brutal en nuestra sociedad, y la
violencia es aprendida o imitada, agregó.
Asimismo aclaró que el alza en los asesinatos no obedece
sólo a la impunidad. Punición e impunidad son términos en desuso porque, desde
hace 3 o 4 décadas, ya no hay castigo sino medidas de tratamiento.
Finalmente dijo que únicamente la sociedad organizada puede
cambiar la situación actual. El Estado no actúa por sí solo y no se puede
confiar en las instituciones que han instituido prácticas corruptas, que operan
aisladas de la sociedad y sólo sirven a los intereses de los grupos políticos.
Son muy eficaces para controlar mediante registros y estadísticas, se han
convertido en censores del descontento social, pero no cumplen las tareas para
las que fueron creadas.
Continúa...
Continúa...
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