Cuando
se dice que Oaxaca se cuece aparte, es cierto, hay cuestiones que
efectivamente, sólo ocurren en Oaxaca, hasta lo más sorprendente puede
pasar en éste estado que ocupa el segundo lugar en pobreza y
marginación. Actos de barbarie como el hecho de que indígenas y personas
de escasos recursos económicos sean tratados como animales, en tiempos
modernos, y lo más asombroso todavía, nadie hace nada por frenar estas
situaciones.
Aun se pasea alegremente el director de los
Servicios de Salud en Oaxaca Germán Tenorio Vasconcelos después de las
graves, que digo graves, atroces anomalías en la dependencia que él
dirige, ni la más mínima vergüenza por los hechos que a nivel nacional e
internacional han circulado después de que una mujer indígena pariera
como bestia en el patio de uno de los centros de salud a su cargo.
Como
sea que fuera el caso, el asunto estaba pasando y el auge mediático
también, pero a pocos días se reafirma la incapacidad de éste personaje
por darle una solución a los miles de problemas que deben existir en esa
dependencia, en una colonia conurbada se repite la misma historia, una
mujer no fue atendida y dio a luz fuera del Centro de Salud de San
Antonio de la Cal, localidad que se encuentra a 10 minutos de la
capital.
Esta misma semana, en San Pedro Pochutla, un
grupo de personas llamaron a distintas radiodifusoras, desesperadas
porque en el nosocomio de aquel lugar, no llegan a tiempo las
secretarias y las consultas se retrasan por horas y cuando no se les
antoja a las trabajadoras, pues, simplemente no atienden, precisamente
en ese hospital le han negado el servicio a decenas de mujeres que
requieren chequeo médico y atención urgente.
Si se
necesitan elementos negativos para sustituir a alguien que tiene un
cargo público, y hablamos de los funcionarios, pues ahí están, no es
suficiente que las capas mas desprotegidas, que sólo tienen acceso a los
servicios públicos de salud, se estén muriendo o estén pasando las
peores vejaciones en estos centros hospitalarios que el gobierno tanto
promueve como la panacea necesaria en este periodo del también supuesto
cambio.
No solo causa indignación, sino hasta vergüenza los dos casos actuales, el de la
mujer
mazateca haya sido desatendida y dio a luz en el patio del hospital y
el de la mujer de San Antonio de la Cal, donde el médico la mandó de
regreso a su hogar porque aun no era el momento de que esta mujer diera a
luz; cuanta insensibilidad y falta de vocación y ética en ambas partes y
además desde luego, reluce nuevamente la incapacidad de Germán Tenorio,
titular de la SSO y del mismo gobernador Gabino Cué, ya que ambos no
han podido dar una solución a las necesidades de la Red Hospitalaria de
Oaxaca.
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